No Ven Lo Que Veo
He recibido varios mensajes en los que me dicen que he perdido la cabeza por una mujer que en nada merece la pena y se atreven a enumerar aquello que consideran sus defectos fisicos. Me preguntan, que he visto en ella y que no entienden nada. Evidentemente estos comentarios no son publicados por respetar tanto a la persona a la que se refieren como a ellos mismos, pues desde mi punto de vista se definen por si solos y a ellos quisiera contestarles, esperando que sepan de igual modo respetar y entender mi actitud.
Mis queridos amigos y seguidores, siempre existe más de una verdad. Una es la que veo yo, y otra la que ven los demás, yo no veo lo que ven, ni ellos ven lo que yo veo, es por eso normal “que no entiendan nada”. De igual forma yo no debería entenderlos. Pero me pregunto dónde está la realidad, el modelo, el patrón de belleza que se ha establecido.
Se encuentra en el Espíritu que sabe apreciar lo que verdaderamente importa. Cada uno tiene su forma de mirar, y desde esta forma, cada cual tiene sus prioridades, sus gustos, sus necesidades, algo por lo que siente curiosidad, atracción, desprecio o indiferencia, y lo que algunos consideran defectos, pueden ser mi más preciada debilidad. Nunca me consideré extravagante o persona de mal gusto, sino todo lo contario y aunque sea algo que los demás pueden valorar, es al fin y al cabo, algo absoluta y exclusivamente mío.
Al ser exigente conmigo mismo lo estoy siendo en todos los aspectos de mi vida. Forma parte de mí, para bien o para mal, soy bastante selectivo y se apreciar todo lo que encierra belleza, no solo en las personas, sino en todo cuanto me rodea, disfruto de todo lo que es sencillo y natural por lo que lo hago con autentica veneración y nobleza.
Ya he dedicado anteriormente otros artículos en los que expreso mi particular forma de valorar un gesto, una mirada o un silencio, siendo capaz por si solos, de transmitir más de mil palabras.
Lo triste, es que este tipo de apreciaciones respecto a lo que gusta o no, se hayan construidos desde el patrón que esta sociedad ha hecho creer a los ingenuos para vender. La triste pena y verdad, es que la mayoría, no piensa, ni ven, ni valoran por ellos mismos, sino por una moda impuesta y ese criterio lo hacen suyo. Solo tienen ojos para un patrón establecido y pierden la natural esencia en la forma de mirar y con ella su más autentica integridad. Abandonan ciega, sorda y encerrada a su verdadera libertad, en un zulo de apariencias, careciendo entonces, desde mi punto de vista de sentido, y credibilidad su forma de valorar.
Es indudable que toda belleza salta a la vista, en todos los lados se puede admirar, pero también lo es, que no todos la vemos igual. ¿Quién es el ciego entonces? ¿Quién el equivocado?
Ni hay ciegos ni equivocados, los hay que todo lo han encasillado y los hay que en la variedad, y en otros muchos aspectos, encuentran el sentido de una belleza que nace de dentro y es capaz de trasmitirse fuera a través de los gestos, el sonido de una voz y la particular forma de proceder y comportarse, como signos identificativos de la verdadera personalidad de cada individuo.
Yo sé lo que me gusta, lo que me llena, lo que transmiten otras Almas cuyas señales conectan con la mía, pero es mi forma de mirar, la de sentir una voz y reconocerla como mía, es mi forma de sentir, observar una mirada y ver en ella la belleza escondida, que pasa desapercibida para esa mayoría.
Qué gran suerte la mía de poder ver más allá de lo que en esta vida otros no miran, si yo solo veo belleza en todo cuanto me llega, pues es mi corazón quien me avisa, porque late más deprisa, se vuelve loco cuando otra Alma le atraviesa, se desboca porque sabe apreciar quizás, que aun es más bella que la mía y por eso, nada le importa lo que digan los demás.
Destacar los defectos de los demás, es juzgar, pero desde el juicio que cada uno tiene de su propio yo, por lo que aquello que considera defecto, es algo que no acepta en si mismo. Recordad que cuando una mano te señala con un dedo, tres de esa misma mano están señalando al mismo que te señala.
Felix Moratilla
Esta reflexión, está registrada y protegida por la ley de propiedad intelectual y el código penal vigente. Puede ser reproducida siempre que acredite mi autoría
Cordialmente: Felix Moratilla
Una verdad de cual muchos no ven pero cual todos sentimos.. la bella es lo que alimenta la Verdad, lo que nace de lo mas profundo aquello que despierta Amor puro. No soy ni modelo ni actriz, pero soy hija de Dios y, ese amor me hara bella en los ojos del quien quiera juntarse con mi rama.. Esperoo que vivas lo que escribes con tanta fervencia!
Sigue mirando con Amor y reconoceras en mi la verdad. No suelo escribir nada que no conozca ni defender lo que la razón por si misma deja en evidencia. Quizás por eso detesto ver en las fotos de perfiles fotografias de otras personas y personajes que nada tienen que ver con el verdadero aspecto de la persona que permanece oculta. Si de antemano ocultan su rostro es porque no soportan ser como son, no se aceptan y ponen en su lugar lo que les gustaria ser o como lucir ante el mundo. Este tipo de personas le estan dando mas importancia a lo que piensan y persiguen los demás, se encuentran atrapados en ese grupo que ha idealizado y encasillado lo que considera bello para llamar la atencion de todos.
El que se averguenza de su aspecto, sencillamente no se acepta, ni se ama, ni se reconoce, por lo que no espere que le acepten, le amen o le reconozcan todos los demás. La verdadera belleza esta en lo que se siente mucho mas que en lo que se ve, pero lo que se ve por fuera es el fiel reflejo de como se es por dentro.